Lo que pasa conmigo es que quiero demasiado.
Quiero más de lo que la gente quiere ser querida, y tengo que reprimirme, hacerme la fuerte, la dura.
Pero no lo soy, y querría estar contigo todo el tiempo.
Con mi cabeza apoyada en tu estómago.
Sintiendo tus caricias en mi cara.
Pero aquí estoy, escribiendo, tan lejos de ti.
Y te necesito.
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